Bashar Al Assad ejerce su derecho a voto, junto a su mujer Asma.
La loca y asesina de la Clinton se entera del resultado de las elecciones en Siria.
La jornada electoral que la República Árabe Siria celebró en el día de ayer, fue un rotundo éxito, que en el plano internacional representa una firme cachetada a occidente y las monarquías árabes que a esta altura del partido pretendían ya haber invadido el país árabe y asesinado a su presidente Bashar Al Assad.
Luego de más de tres años de una impuesta y sangrienta guerra, Siria ayer realizó elecciones presidenciales que terminaron arrojando un apabullante apoyo a la conducción nacional de Al Assad, no solo por ser respaldado por más del 88 % de los votantes, si no que fundamentalmente por la alta participación de los sirios en los comicios.
Al menos el 75 % del padrón electoral del país acudió a las urnas, frente al pretendido fracaso que occidente y sus medievales aliados árabes habían proyectado; por lo cual se encuentran ante una nueva demoledora derrota frente al hombre que desde hace más de tres años buscan tumbar.
Bashar Al Assad ha sido elegido presidente dentro del nuevo marco juridico-politico sirio, que transformó a la vieja estructura estatal baasista y gobernará el país árabe por los próximos 7 años.
El Ejercito Árabe Sirio en lo que va del año ha logrado victorias significativas contra los terroristas y fanáticos de Al Qaeda y otras organizaciones afines, que quedaron abandonados por sus financistas de EEUU, Israel y la UE al no obtener de ellos los resultados esperados.
En claro queda, que la guerra que EEUU, la UE, Israel, Turquía, Arabia Saudita y otros, impusieron a la nación árabe socialista, termina siendo un fracaso total pues su enemigo público número uno (Bashar Al Assad), ha quedado muy fortalecido y con un apoyo popular grandísimo, como lo demuestran los resultados de las elecciones de ayer.
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