Militantes de la izquierda ecuatorianase dirijen a rescatar a su presidente.
Hoy en ecuador, un margen importante de policías tomó a la fuerza el regimiento número 1 de la ciudad capital de Quito, en protesta contra la modificación de la ley de servicios públicos que elimina bonificaciones a los ascensos.
Ante dicha situación, el presidente ecuatoriano Rafael Correa, se hizo presente en el lugar junto a algunos asesores y un pequeño cuerpo de seguridad, con el motivo de solucionar el conflicto. Allí Correa buscó calmar a los agentes policiales, pero estos, que en ningún momento se mostraron respetuosos con su presidente, lo insultaron y lo desafiaron, por lo que el presidente ecuatoriano contestó con una estirpe patriótica pocas veces vista en todos los lideres del mundo. Con bronca se aflojó la corbata, se desprendió la camisa y dándose palmadas en el pecho les gritó a los golpistas: “acá estoy, maten al presidente si es lo que quieren”.
Luego de no poder acordar con los insurrectos, estos empezaron a lanzar gases lacrimógenos al presidente, haciéndole producir fuertes mareos e irritaciones, por lo cual tuvo que ser internado rápidamente en el hospital más cercano.
La cesación laboral de los policías, hizo que en el país, los delincuentes encuentren el camino allanado para la realización de delitos, por lo que se han producido muchos robos y saqueos.
La desobediencia de los policías en primera instancia causó un serio contagio en otros policías e incluso en bases militares, por lo cual el problema dejó de ser una mera cuestión salarial y se convirtió en un intento de golpe de estado, ya que quienes diseccionaban las protestas pedían la dimisión de Correa a la presidencia.
Desde dentro del hospital en el cual fue socorrido, Rafael Correa en comunicación telefónica con diferentes medios de prensa, dejó en claro que no daría marcha atrás en su postura respecto a la modificación de la ley de servicios públicos y además reconoció estar rodeado por los insurrectos y dijo estar prácticamente secuestrado, a la vez que estableció que a futuro se necesitará una exhaustiva purga policial para que tamaños desmanes no vuelvan a ocurrir. En su comunicación con la prensa, Correa dejó en claro que a los policías para nada se les había recortado el sueldo, si no que todo lo contrario, ya que su gobierno lo que ha hecho, como también lo hizo con otros gremios, es duplicar los sueldos, en esta ocasión lo que el gobierno buscaba a través de la modificación en la ley de servicios públicos, era eliminar los privilegios y limitar las bonificaciones por ascenso; no recortar el sueldo de los policías.
Desde todos los países se ha reconocido al accionar de los insurrectos, como un intento de golpe de estado y a declarado su apoyo al legitimo presidente del ecuador, Rafael Correa.
De inmediato UNASUR decidió desarrollar una reunión extraordinaria para tratar el tema, que se hará en las horas venideras en Argentina.
De todas las defensas de pares que Correa ha tenido, dentro de las cuales se incluye también a la del presidente colombiano Manuel Santos; la de Evo Morales fue la mas contundente y remarcó que todo se trata de una medida direccionala por Washington como lo fue el pasado golpe de estado en Honduras que sufriera Manuel Zelaya. “Están atacando al ALBA y a la UNASUR.
El legislador por el partido Alianza País, Paco Velazco, informó que el pueblo ecuatoriano se encuentra a una cuadra del Hospital de la Policía Nacional, donde funcionarios de seguridad de ese país mantienen secuestrado al presidente Rafael Correa.
"Vamos a rescatar a nuestro presidente constitucionalmente electo. No vamos a permitir que lo saquen del poder a la fuerza", aseveró Velazco en un contacto telefónico con la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Ante dicha situación, el presidente ecuatoriano Rafael Correa, se hizo presente en el lugar junto a algunos asesores y un pequeño cuerpo de seguridad, con el motivo de solucionar el conflicto. Allí Correa buscó calmar a los agentes policiales, pero estos, que en ningún momento se mostraron respetuosos con su presidente, lo insultaron y lo desafiaron, por lo que el presidente ecuatoriano contestó con una estirpe patriótica pocas veces vista en todos los lideres del mundo. Con bronca se aflojó la corbata, se desprendió la camisa y dándose palmadas en el pecho les gritó a los golpistas: “acá estoy, maten al presidente si es lo que quieren”.
Luego de no poder acordar con los insurrectos, estos empezaron a lanzar gases lacrimógenos al presidente, haciéndole producir fuertes mareos e irritaciones, por lo cual tuvo que ser internado rápidamente en el hospital más cercano.
La cesación laboral de los policías, hizo que en el país, los delincuentes encuentren el camino allanado para la realización de delitos, por lo que se han producido muchos robos y saqueos.
La desobediencia de los policías en primera instancia causó un serio contagio en otros policías e incluso en bases militares, por lo cual el problema dejó de ser una mera cuestión salarial y se convirtió en un intento de golpe de estado, ya que quienes diseccionaban las protestas pedían la dimisión de Correa a la presidencia.
Desde dentro del hospital en el cual fue socorrido, Rafael Correa en comunicación telefónica con diferentes medios de prensa, dejó en claro que no daría marcha atrás en su postura respecto a la modificación de la ley de servicios públicos y además reconoció estar rodeado por los insurrectos y dijo estar prácticamente secuestrado, a la vez que estableció que a futuro se necesitará una exhaustiva purga policial para que tamaños desmanes no vuelvan a ocurrir. En su comunicación con la prensa, Correa dejó en claro que a los policías para nada se les había recortado el sueldo, si no que todo lo contrario, ya que su gobierno lo que ha hecho, como también lo hizo con otros gremios, es duplicar los sueldos, en esta ocasión lo que el gobierno buscaba a través de la modificación en la ley de servicios públicos, era eliminar los privilegios y limitar las bonificaciones por ascenso; no recortar el sueldo de los policías.
Desde todos los países se ha reconocido al accionar de los insurrectos, como un intento de golpe de estado y a declarado su apoyo al legitimo presidente del ecuador, Rafael Correa.
De inmediato UNASUR decidió desarrollar una reunión extraordinaria para tratar el tema, que se hará en las horas venideras en Argentina.
De todas las defensas de pares que Correa ha tenido, dentro de las cuales se incluye también a la del presidente colombiano Manuel Santos; la de Evo Morales fue la mas contundente y remarcó que todo se trata de una medida direccionala por Washington como lo fue el pasado golpe de estado en Honduras que sufriera Manuel Zelaya. “Están atacando al ALBA y a la UNASUR.
El legislador por el partido Alianza País, Paco Velazco, informó que el pueblo ecuatoriano se encuentra a una cuadra del Hospital de la Policía Nacional, donde funcionarios de seguridad de ese país mantienen secuestrado al presidente Rafael Correa.
"Vamos a rescatar a nuestro presidente constitucionalmente electo. No vamos a permitir que lo saquen del poder a la fuerza", aseveró Velazco en un contacto telefónico con la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
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