Mientras la elite mundial difama con vehemencia el modelo keynesiano del estado benefactor, son los países del “ansiado” euro y del modelo neoliberal quienes no encuentran solución a sus problemas mas urgentes.
Portugal sería el nuevo país que se sumaría a la crisis.
En Grecia, la huelga de 48 horas convocada por el Frente Militante de Todos los Trabajadores (PAME) fue acatada de forma masiva por los trabajadores y militantes de izquierda griegos, llevandose a cabo en el pais multitudinarias concentraciones en 69 ciudades que contaron con la participación de decenas de miles de trabajadores del sector publico y privado y también de militantes políticos.
Las fuertes concentraciones populares que se llevaron a cabo en el país europeo y la reacción de los agentes de seguridad en algunas ciudades, demuestran una fuerte oposición de los trabajadores y la izquierda griega a las medidas antisociales y horrorosamente ultra-neoliberales del gobierno socialdemócrata de Georgios Papandreou y también reflejan el éxito de la convocatoria combativa.
En Atenas, ayer, la policía disparó gases lacrimógenos contra manifestantes de izquierda que marchaban por el centro de la ciudad en protesta contra las medidas de austeridad del Gobierno. La marcha en la capital griega concentró a mas de 3.500 personas y cuando un pequeño grupo de manifestantes intentó pasar un cordón que impedía la aproximación a las oficinas de la Unión Europea en Atenas, la policía reprimió lanzando gases lacrimógenos.
Las medidas del gobierno griego promocionan: la reducción de salarios y pensiones, generalización de las formas flexibles de trabajo, liberalización de la limitación de despidos, aumento de los límites de edad de jubilación, privatización a través de reestructuraciones reaccionarias de la unión de municipios, levantamiento de la ley de cabotaje en la navegación ampliando el trabajo negro, la liberalización de las profesiones “cerradas” etc.
El modelo de estado benefactor, modelo que propone un estado que intervenga en las actividades económicas y sociales, duramente criticado por los funcionarios ilustrados del viejo continente; en la actualidad y a pesar de la promoción de la oligarquía mediática, ofrece soluciones y beneficios basados en el bienestar general. Puesto que mientras que encontramos en la coyuntura actual a países como Grecia, Portugal y España sumergidos en una crisis aguda con record de desempleo y pobreza; en otra situación encontramos a países como Belarús, Republica Bolivariana de Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, China, etc. Quienes tienen frente a las demandas sociales una actitud estatal activa que proporcionan la satisfacción del bienestar social general. En Belarús, distintamente a lo que ocurre con las otras 14 ex republicas soviéticas, la tasa de desempleo se a mantenido debajo del 2% y la seguridad social brinda un verdadero marco protectorio que nunca deja descuidados a trabajadores, jubilados y pensionados; en Venezuela la intervención del estado de manera categórica en las actividades sociales y económicas ha tenido logros significativos como por ejemplo: ser la RBV el país latinoamericano (con excepción de Cuba), con la menor desigualdad social (según informe de la CEPAL), el mayor acceso a Internet y la mayor participación popular.
Dichas situaciones son ajenas a las que experimentan los países del euro constituidos con estados subsidiarios contrarios a la intervención del mismo en los asuntos sociales, hecho que deja a los particulares sin protección real alguna.
Ahora, los inversores entienden que Portugal podría ser la próxima “victima” de la crisis de deuda de los países europeos puesto la obligación de la nación de cumplir con el pago de bonos por el valor de 5.600 millones de euros que vencen el próximo mes.
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